
La emoción no fue sólo de Tania y su familia que se acercó a presenciar este momento, sino que fue compartida por todos sus compañeros y docentes.
El gran sueño de Tania se cumplió, pero este es sólo el primer paso... Más hojas en blanco esperan ser escritas por Tania, que ya comenzó a trabajar para sus nuevas obras.

Tania nos enseña día a día que todos los sueños pueden hacerse realidad con esfuerzo y más allá de las dificultades que se tengan.
Gracias Ministro...
Gracias Tania!!!